Omar Palma, ícono indiscutido de Rosario Central, atraviesa un momento crítico tras sufrir un accidente cerebrovascular hemorrágico (ACV) en su hogar. El exfutbolista, de 66 años, se encontraba disfrutando de un momento de tranquilidad tomando mates, cuando de repente se descompensó, lo que lo llevó a ser trasladado al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria en estado delicado.
Según el informe médico emitido el día de hoy, Palma sigue en un estado crítico con pronóstico reservado. Tras ser evaluado por los especialistas, se constató que llegó en coma y con síntomas de hipertensión, por lo que rápidamente se llevaron a cabo una serie de estudios, entre ellos una tomografía, que confirmaron el diagnóstico de un accidente cerebrovascular hemorrágico.
Debido a la gravedad de su condición, fue necesario realizarle una cirugía y una embolización cerebral en el Hospital Italiano de Rosario, donde se encuentra internado en la Unidad de Terapia Intensiva, recibiendo asistencia ventilatoria mecánica.
La espera de familiares y amigos
En la entrada del hospital, amigos cercanos como Alfredo Killer y José Camello Di Leo, también exfutbolistas de Central, compartieron su angustia por la situación. Ambos se encuentran a la espera de noticias y se han ofrecido a apoyar a la familia de Palma en estos difíciles momentos.
Di Leo expresó su preocupación, destacando que todos están angustiados por la situación, pero también mencionó que la operación había sido exitosa y que el estado de Palma estaba más estable en comparación con el día anterior. “Es un proceso del día a día, necesitamos ser pacientes”, aseguró.
El impacto en la comunidad canalla
La noticia sobre la salud de Palma ha causado un gran revuelo entre los hinchas canallas y la comunidad de Rosario, donde es considerado uno de los más grandes ídolos del club. Tras conocerse el diagnóstico, las redes sociales se inundaron de mensajes de apoyo y buenos deseos para la leyenda del fútbol local.
Palma comenzó su carrera en Rosario Central en 1979, conquistando múltiples títulos, entre ellos el Nacional 1980, el Campeonato 1986/1987 y la Copa Conmebol 1995. Tras su retiro en 1998, se mantuvo vinculado al club, además de incursionar en la política como presidente comunal de Ibarlucea entre 2005 y 2009. También tuvo una breve trayectoria como entrenador en 2011, donde dirigió en la B Nacional.
El viernes anterior al accidente, se le vio en un evento de fútbol juvenil, lo que demuestra su continuidad en el entorno del club. Un amigo reveló que tenían planes de almorzar el día del accidente, lo que hace que la situación sea aún más difícil de asimilar para sus seres queridos y seguidores.
La comunidad se mantiene atenta a las actualizaciones sobre su salud, esperando que reciba la mejor atención y pronto se recupere.