Los bloqueos sindicales han vuelto a centrar la atención, especialmente tras el reciente acuerdo entre el Gobierno y la CGT. Este miércoles, el Movimiento Empresarial Anti Bloqueos (MEAB) llevará su preocupación directamente al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, manifestando su desacuerdo con la decisión de consensuar con la CGT la reglamentación del artículo de la Ley Bases que castiga los bloqueos. Este desarrollo ha encendido las alarmas en el sector empresarial, ya que sugiere una posible concesión del Gobierno al sindicalismo.
El comunicado emitido por Juan Méndez, líder del MEAB, es contundente. Describe la decisión como un “dislate” y advierte que puede convertir en letra muerta lo que ha sido sancionado por el Congreso de la Nación. La inquietud de los empresarios proviene de la creación de una comisión tripartita que busca reglamentar el artículo que considera los bloqueos como un agravio laboral grave, lo que podría llevar a despidos justificados.
Un Acuerdo que Preocupa
La reciente alianza entre el Gobierno de Javier Milei y la CGT abre un escenario de tensión en el ámbito empresarial. La postura de la CGT, que busca suavizar la reglamentación de los bloqueos, ha sido recibida con recelo. “Si se nos convoca, asistiremos para expresar que los bloqueos no son pasos legítimos”, afirmó un directivo industrial. Con este acuerdo, se corre el riesgo de que se genere un contexto en el que los empleadores vean limitadas sus capacidades de acción.
El artículo anti-bloqueos es una de las dos piezas fundamentales de la reforma laboral que la CGT ha pretendido modificar. El otro aspecto en discusión se refiere a la creación de la figura de trabajador independiente. En la agenda de la reunión entre las partes, la CGT propuso un procedimiento judicial previo al despido, lo que la Unión Industrial Argentina califica como “inaceptable”, sosteniendo que podría volver a hacer la medida negociable y no taxativa.
Debates Internos en el Gobierno
Las negociaciones para la reglamentación del artículo han puesto de manifiesto desacuerdos entre importantes funcionarios del gabinete. Mientras Federico Sturzenegger, Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, resaltó la dificultad de aplicar reglamentaciones a un artículo que menciona bloqueos totales o parciales, su colega Santiago Caputo defendía la idea de considerar las sugerencias de la CGT. En este tira y afloja, el trabajo del secretario de Trabajo, Julio Cordero, se consolidó cuando decidió no avanzar en la reglamentación.
¿Qué Implica Este Acuerdo?
- Precedente Legal: La interpretación del artículo anti-bloqueos podría depender de los jueces, generando incertidumbre.
- Impacto en la Industria: Un panorama incierto para los empleadores, quienes han mostrado su rechazo a un cambio en esta legislación.
- Repercusiones en el Empleo: Podría haber un aumento en los despidos justificados si los bloqueos son considerados injurias laborales.
Una perspectiva alentadora fue ofrecida por un pequeño empresario, quien enfatizó que una correcta reglamentación podría ser positiva, aunque advirtió que el sector empresarial estaría dispuesto a confrontar si las promesas de cambio del Presidente no se cumplen. Esta situación de tensión entre los intereses del Gobierno y las demandas sindicales podría llevar a futuras movilizaciones o disputas en el ámbito laboral.
Al culminar la reunión entre el Gobierno y la CGT, un funcionario ligado a la administración actual negó la posibilidad de un retroceso en su postura, enfatizando que el objetivo es crear un protocolo claro respecto a los bloqueos, fecha que marca un nuevo hito en la relación entre las entidades sindicales y el sector empresarial.